Los macarrones con pollo así guisados como los hace mi madre me encantan y la verdad es que me salen muy ricos, aunque no se por que, pero como los de mi madre no me quedan 😅. Es una de esas recetas de toda la vida que cuando la comes, rápidamente te trae recuerdos de la infancia. son muy fáciles de hacer y seguro que si tenéis niños en casa les van a gustar mucho. Las cantidades como siempre son orientativas porque tendréis que aumentar si sois muchos en casa o reducir si sois pocos.
Ingredientes:
-1/2 kg de macarrones (plumas)
-4 zancos de pollo
-2 o 3 dientes de ajo
-1 cebolla
-1/2 pimiento rojo (o verde)
-1 o 2 tomates maduros
-1 cucharadita de pimentón dulce
-aceite de oliva
-sal
Elaboración:
Doramos un poco el ajo picado en una tartera con un poco de aceite. Le añadimos la cebolla y el pimiento también picados y una pizca de sal.
Cuando esté todo bien pochado añadimos el pollo troceado a nuestro gusto y lo doramos.
Añadimos el pimentón dulce, le damos unas vueltas,
y rápidamente echamos el tomate pelado y picado para que no se queme el pimentón. Dejamos que se cocine el tomate hasta que veamos que está bastante deshecho.
Cuando veamos que el tomate está bien cocinado añadimos un poco de agua hirviendo hasta cubrir el pollo y dejamos cocinar unos 10 minutos.
Cocinamos todo hasta que la pasta esté a nuestro gusto. A mí particularmente me gusta al dente, pero hay gente que la prefiere bastante hecha, así que será cuestión de ir controlando hasta que esté a nuestro gusto.
Sólo nos queda servir y comer nuestros riquísimos macarrones con pollo. La verdad es que la foto no dice mucho, pero os puedo asegurar que estaban buenísimos.
Para completar nuestro menú, acompañamos de una ensalada. Esta era de espárragos, mandarina y tomates cherry, aliñada con sal y aceite de oliva.
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