Tarta red velvet con crema de queso y fresas

Ayer hice esta tarta red velvet con frosting y fresas para celebrar que era un día especial y para estrenar mi regalo, un molde nuevo de Nordic Ware, aunque bueno, estrenar, estrenar, lo estrené el domingo para hacer una tarta de zanahoria porque tenía invitados. Tengo dos moldes de esta marca y la verdad es que son buenísimos y aunque son un poco más caros que otros tipos de moldes, valen la pena porque duran un montón de años. Los que yo tengo son de una tienda de repostería creativa de Coruña que se llama los Postres de Kelly. Os pongo la foto del molde modelo Brilliance para que veáis lo bonito que es.

Como os comentaba antes, hice esta tarta para celebrar el día del padre y también mi cumpleaños y la verdad es que salió riquísima, suave, esponjosa y con una textura aterciopelada haciendo honor a su nombre. Cuando tengáis un ratito probad esta receta de red velvet, no os arrepentiréis.

Ingredientes:
-3 huevos
-3 vasos de harina (medida de yogur)
-1/2 vaso de cacao puro en polvo
-1 vaso de aceite de girasol
-1 vaso de azúcar
-1 vaso y 1/4 de butter milk (leche cortada con limón)
-1 limón (para el butter milk)
-1 sobre de levadura
-1 cucharadita de bicarbonato
-1 cucharadita de esencia de vainilla
-2 cucharaditas de vinagre
-6 cucharaditas de colorante rojo
-1 pizca de sal

Para decorar:
-queso de untar
-azúcar glass
-un poco de leche
-fresas

Elaboración:
Lo primero es hacer el buttermilk que es cortar la leche con el zumo del limón y lo dejamos reposar.
Si no queréis hacer esto lo podéis sustituir por un yogur natural o de vainilla.

Mientras tanto vamos batiendo los huevos con el azúcar y la sal.

Echamos el aceite y removemos un poco.

Añadimos la esencia de vainilla.

También añadimos el buttermilk y mezclamos.

 Echamos las dos cucharaditas de vinagre.

Ahora añadimos el colorante y mezclamos bien.

En un bol aparte mezclamos los ingredientes secos, que son harina, levadura, cacao y bicarbonato.

Añadimos esta mezcla a la mezcla anterior pasándola por un colador.

Batimos para que se integre todo bien y no queden grumos.

Engrasamos el molde que vayamos a utilizar y echamos dentro la masa. Cuando la tengamos en el molde le damos unos golpecitos para que se asiente bien la masa.

Horneamos a 180º de  35 a 40 minutos. Mirad que color tan chulo. Esperamos unos 10 o15 minutos para desmoldarlo.

Con lo bien que queda en este molde con un poco de azúcar glass ya quedaría bonito, pero como era un día especial lo adorné un poco más.

 Hice un frosting de queso ligero para que resbalase por los canales que hace el molde. Para ello mezclamos queso de untar, azúcar glass y unas cucharaditas de leche dependiendo del espesor que nos guste. Le puse unas fresas que van genial con el sabor del bizcocho y la crema de queso, y además le dan un toque precioso.

¿Qué os parece?  A mí me encantó la apariencia y el sabor... mmmmm ni os cuento.
Mirad el corte,  menos mal que le hice la foto antes de que se acabara, que no sería la primera vez 😊

Saludos.
Sé.