Bizcocho de cacao y nueces con harina de espelta

 

Si sois de los que os gustan los bizcochos y no habéis utilizado nunca la harina de espelta integral, probad a hacer éste con esa harina, con cacao y unas cuantas nueces, os va a gustar sí o sí. Las nueces en los bizcochos me encantan y con un poquitín de frosting de queso por encima tenemos el éxito asegurado. Éste bizcocho de cacao y nueces con harina de espelta, es muy fácil de hacer, siiiiii, ya se que lo digo siempre, pero es que es verdad, es muy fácil de hacer y nos os llevará mucho tiempo, a no ser que vuestras nueces sean caseras y os cueste tanto pelarlas como a mí 😅 

Ingredientes:

(las medidas en vaso de yogur)

-3 huevos
-1 pizca de sal

-1 vaso de azúcar (o 2 si sois muy larpeiros)

-1 vaso de aceite (girasol u oliva)

-1 vaso de buttermilk (o 1 yogur natural)

-3 vasos de harina de espelta integral

-1 sobre de levadura química 

-2 o 3 cucharadas de cacao puro en polvo

-1 cucharadita de vainilla

-nueces al gusto

Para el frosting, que es opcional totalmente:

-2 o 3 cucharadas de queso crema

-la misma cantidad de azúcar glass

-2 o 3 cucharaditas de leche 

Elaboración:

Lo primero como siempre es batir los huevos con el azúcar y la pizca de sal, cuando estén bien batidos añadimos el aceite y volvemos a mezclar bien.

Para hacer el buttermilk echamos el zumo de medio limón en la leche y dejamos reposar unos minutos. cuando esté listo lo añadimos a la mezcla. Integramos todo bien.

Ahora echamos la harina de espelta y la levadura tamizándola con un colador.

Como la harina es integral, se nos quedará la fibra en el colador pero se la echamos también. Mezclamos bien con las varillas hasta integrar toda la harina.

Ahora añadimos el cacao en polvo y mezclamos otra vez.

Le añadimos la vainilla y removemos para que se integre bien.

Es el momento de pelar las nueces, si las tenéis peladas os ahorraréis un poco de tiempo. Como veis las mías eran caseras, no son tan bonitas como las que se venden pero son más sabrosas.

Aquí están las nueces que le puse, podría ponerle más pero es que son tan duras que me cuesta un montón pelarlas.

Añadimos las nueces a la masa y mezclamos un poco.

Engrasamos un molde y echamos la masa. Le ponemos 4 nueces o trozos por encima para que se vean y horneamos media hora a 180º con calor arriba y abajo. Hacia el final de la cocción podemos ir mirando con un palillo porque depende el horno a lo mejor varía un poco el tiempo y no queremos que nos quede ni muy crudo ni muy pasado.

Cuando esté hecho, lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar un poco antes de desmoldarlo.

Aquí lo tenía ya medio desmoldado porque éste molde tiene la base con la chimenea que se separa de los laterales.

Para hacer el frosting mezclamos con unas varillas la crema de queso y el azúcar, y le vamos echando la leche de a poquitos hasta obtener una consistencia ni muy espesa ni muy líquida; ya lo vais viendo según vais batiendo. 

Cuando lo tengamos hecho  se lo echamos por encima y ya podemos disfrutar de un rico bizcocho de cacao y nueces con harina de espelta casero y rico, rico.

Un saludo,

Sé.

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Arroz con verduras y pollo casero

 

Este arroz con verduras y pollo casero lo hice en verano cuando una amiga me regaló medio pollo de su casa y la verdad es que es muy distinto al pollo que compramos habitualmente, incluso al que nos dicen que es de corral. El pollo casero de verdad tiene otro color y otro sabor más intenso y por supuesto mucho más rico que el comprado. Aunque sólo era medio pollo me cundió bastante porque era muy grande. En mi casa el arroz con pollo les encanta, es por eso que lo hago a menudo y se van tan contentos a sus quehaceres diarios. Lo adorné con unos cuantos pimientos de padrón que freí ese día, porque me encantan, para acompañar el arroz.

Ingredientes:

-pollo (mejor casero)

-arroz (según comensales)

-2 o 3 dientes de ajo

-1/2 pimiento verde

-1/2 pimiento rojo

-1 puerro

-1 cucharadita de pimentón dulce

-unas hebras de azafrán

-2 o 3 zanahorias

-unas cuantas judías verdes

-1 lata pequeña de tomate triturado (o 2 tomates maduros)

-aceite de oliva

-sal

Lo primero es trocear el pollo, éste venía con la pata y todo. Yo saqué el hueso de la pechuga y también partí a la mitad el contramuslo porque era grande. Salamos el pollo y lo ponemos a dorar bien en una tartera con un poco de aceite.

Mientras se dora el pollo, ponemos la pata, los huesos y las pieles del pollo a cocer para hacer un caldo y así aprovecharlo para el arroz.

Cuando el pollo esté dorado lo sacamos a una fuente y reservamos.

En la tartera del pollo doramos los dientes de ajo picados y cuando estén un poco hechos echamos el pimiento rojo y verde bien picados. 

Le damos unas vueltas y añadimos el puerro también kpicado.

Cuando esté todo bastante pochado echamos el pimentón dulce y las hebras de azafrán.

Le damos unas vueltas y rápidamente añadimos el tomate triturado para que el pimentón no se queme porque si no daría un sabor muy amargo a todo.

Mezclamos el tomate y añadimos el pollo que tenemos reservado.

Echamos un poco del caldo que hicimos con los restos del pollo hasta cubrirlo y dejamos cocer un buen rato porque el pollo casero es más duro que el comprado, por lo menos lo dejaremos 1/2 hora antes de echar el resto de verduras.

Mientras tanto, pelamos y picamos las zanahorias y también lavamos y picamos las judías verdes.

Pasada más o menos la media hora añadimos las zanahorias y las judías verdes. Mezclamos todo bien y dejamos un par de minutos.

Añadimos el arroz.

Removemos un poco el arroz.

Añadimos el caldo correspondiente a la medida de arroz. Según el tipo de arroz que sea va desde el doble de caldo que de arroz, o tres partes de caldo por una de arroz.

Mezclamos todo bien y lo dejamos cocinar todo hasta que el arroz haya consumido todo o casi todo el caldo. En este momento podemos probar como está de sal el caldo y si hace falta podemos añadir un poco más. Ya vamos viendo hacia el final como nos va quedando y si hace falta podemos añadir un poco más de caldo si es que el arroz todavía está duro. Le llevará mas o menos unos 20 minutos.

A mí me gusta un poco jugosito, por eso le añado un poco más de caldo para que me quede así como veis en la foto. Tiene buena pinta ¿no? como dice mi madre: "inda che valía pra un día de festa"

Y aquí está mi plato de arroz con verduras y pollo casero que estaba de rechupete, y con los pimientos de padrón, ni os cuento 😋

Si acompañamos de una rica ensalada, tendremos un menú completo y equilibrado. Ésta era de lechuga roja, naranja, tomate y maíz, aliñada con aceite y sal.

Un saludo,

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Sopa de verduras y arroz con huevo cocido

 

Que rica, que sana y que nutritiva es la receta que comparto hoy con vosotros, una sencilla sopa de verduras y arroz con huevo cocido que es una estupenda idea para un primer plato o para una cena. Esta receta también vale para los vegetarianos porque el huevo cocido como se lo ponemos al final, es totalmente opcional. El caso es que os animéis a hacer sopas distintas a la clásica sopa de pollo con fideos y os pongáis manos a la obra con este tipo de recetas súper sencillas y muy económicas. Sobra decir que las cantidades son orientativas porque según los que seáis en casa, tendréis que utilizar más o menos cantidad de ingredientes.

Ingredientes:

-1 cebolla

-1/2 pimiento verde

-1 zanahoria

-unas cuantas acelgas

-un poco de arroz (como dos puñados)

-1 cucharadita de curry (opcional)

-1 huevo cocido por persona 

-sal

-aceite de oliva

-caldo de verduras (casero o comprado)

Elaboración:

En una olla ponemos un poco de aceite y doramos la cebolla y el pimiento verde picados con un poco de sal. Dejamos que se pochen unos minutos.

Añadimos la zanahoria picada. Cuanto más pequeñito piquemos todo mejor.

Ahora es el turno de las acelgas. Las lavamos bien y las picamos también muy pequeñitas. ¿Que no tenéis acelgas y si otra verdura? pues adelante, echarle lo que tengáis por casa y así haremos cocina de aprovechamiento.

Las añadimos a nuestra mezcla de verduras y les damos unas vueltas.

Echamos la cucharadita de curry para darle un sabor distinto a nuestra sopa. Si no os gusta le podéis echar cualquier otra especia o ninguna.

Echamos el arroz y removemos todo bien.

Cubrimos con el caldo, si no lo tenéis casero podéis utilizar del comprado y si no sois vegetarianos podéis utilizar un caldo de pollo, de carne o el que más os guste. Dejamos cocinar todo junto hasta que el arroz esté hecho que serán, dependiendo del tipo de arroz, unos 15/20 minutos. 

Mientras se cocina la sopa ponemos los huevos en otra olla aparte con agua hirviendo y un poco de sal, en 10/12 minutos estarán hechos. Cuando estén cocidos los escurrimos y los dejamos enfriar un poco antes de pelarlos.

Picamos el huevo y se lo echamos encima de cada plato al servir la sopa. No me digáis que esta sopa de verduras y arroz con huevo cocido no tiene buena pinta 😉

Un saludo,

Sé.

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Mermelada (crema) de castañas y manzana

 

Como todavía tenía castañas en la nevera, el otro día me puse a hacer esta mermelada (crema) de castañas y manzana que un poquito de trabajo si que da, pero vale la pena porque queda muy, muy rica y la textura es más parecida a una crema que a una mermelada porque es muy espesa.  Además en éstos días de pandemia, que nos tienen castigados casi sin salir, hay que entretenerse en algo, así que si tenéis castañas, poneos manos a la obra que después disfrutaréis un montón. Cuando la probé, tenía en casa un pan de calabaza y nueces que tosté un poco, le puse la crema de castañas y me encantó 😋

Ingredientes:

-castañas

-manzana

-azúcar moreno

-agua de cocer las castañas

-fiuncho (hinojo, la parte de las flores)

-pizca de sal

Elaboración:

Lo primero es pelar las castañas para cocerlas, este es el paso que menos me gusta pero no queda otro remedio si queremos hacer algo con castañas.

Ponemos agua a hervir con una pizca de sal y una ramita de fiuncho y echamos las castañas.

Las dejamos cocinarse hasta que estén blanditas. Más o menos 20/30 minutos dependiendo del tamaño de las castañas.

Las escurrimos pero reservamos el agua de las castañas. No importa que queden rotas porque no nos hacen falta muy enteras.  Les quitamos la segunda piel cuando estén un poco frías.

En una olla echamos un poco del agua de cocer las castañas y un poco de azúcar moreno, yo le eché muy poco porque la castaña ya es dulce, pero vosotros echarle a vuestro gusto.

Echamos las castañas en el agua con azúcar.

 Añadimos la manzana pelada y picada. Yo le añadí una, pero si os gusta con más manzana, sin problema le podéis añadir más, de hecho otra vez que la hice llevaba bastante manzana y quedó mucho más clarita que en ésta ocasión y con menos sabor a castaña, así que a vuestro gusto.

Si vemos que se queda seca le añadimos más agua de cocer las castañas.

Removemos de vez en cuando y vamos viendo el punto de espesor y cocción que tiene.

Cuando esté lista la trituramos con la batidora.

Así quedó después de triturarla.

Como todavía estaba bastante espesa le añadí un poco mas de agua de cocción.

En esta textura queda mejor.

Sólo nos queda dejar enfriar nuestra mermelada (crema) de castañas y manzana y meterla en botes, a mi me dio para estos dos.

Otra idea para comerla es tostar un buen pan, ponerle un poco de queso de untar y encima un poco de esta crema de castañas, os va a encantar.

Un saludo,

Sé.

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